18/09/2020 Crecido en el seno de una familia humilde, doblando tus esfuerzos para, por un…
Reina negra: jaque mate ( 3° parte )- Final
20/10/2020
-
¿ Qué no había opción? Decenas de abogados en toda esta jodida ciudad y me sueltas esto, lo siento pero no pienso hacerlo -.
-
No ha sido cosa mía, el asunto viene de más arriba -.
Burdas explicaciones que no te servían de nada, te habías enfrentado a infinidad de casos y con persistencia habías conseguido salir airoso, pero esta vez, no te veías con el valor suficiente como para empezar , y en el caso de poder hacerlo , desconocías como afrontar el reto más grande de tu carrera. Interiormente te negabas en rotundo a aceptarlo porque el odio podía jugarte una mala pasada, pero el código ético y moral, te llevó a ser el fiel escudero del verdugo.
Una vez delante de tu defendido, rápidamente quisiste poner las cartas encima de la mesa, pero esa partida ibas a jugarla en solitario. Verte en la posición de tener que velar por los intereses de quien sesgó la vida de tu compañera, lo veías como un reto imposible, así que decidiste hacer caso omiso a quien te puso en semejante tesitura y actuaste por tu cuenta y riesgo, buscando su cabeza aún poniéndolo todo en juego.
-
Solo voy a preguntarte una cosa y te pediré que seas lo más sincero posible…. ¿ porque? ¿ Que te llevó a cometer ese acto tan deleznable…. era algo premeditado, la conocías de algo, o por el contrario fue cosa del azar y fijaste el objetivo en la primera persona que se cruzó en tu camino. ¿ Que mierda fue ?-.
El fortísimo golpe en la mesa con las manos mientras pronunciabas esas últimas palabras, alertaron a los que se encontraban fuera. El acusado, tan solo se limitaba a bajar la cabeza y pedir un vaso de agua. Habías perdido el norte por completo y por ende, la capacidad de razonamiento, necesitabas un par de días para reflexionar y ver la situación desde otra perspectiva, una en la cual no tuviera cabida el rencor.
Pasados varios días y bastante más calmado, bajaste de nuevo a ver al sujeto causante de tu pesadilla. Te sentaste frente a el, y a partir de ese momento empezó el juego de las miradas, un cruce entre tu odio y su frialdad. No tenías el más mínimo interés en saldar favorablemente el caso, tan solo buscabas respuestas, querías conseguirlas a toda costa, estabas a merced del odio más absoluto, y ello podría llevarte a traspasar la fina línea que separa el bien del mal.
-
Mira, se que no te gusta que esté aquí, pero si te sirve de consuelo, para mi tampoco es plato de buen gusto tener que bajar a verte la cara y mucho menos tener que defenderte, así que contra antes empieces a contarme, antes me iré.
-
¿ Me puede traer un poco de agua y un cigarrillo ? -.
-
Pero…….. ¿ quien demonios te has creído que eres ? No te voy a traer nada de nada hasta que empieces a contarme todo, no se si eres capaz de entender algo tan sencillo -.
-
Si, si, si, entiendo que está aquí para que cante como un pajarito y bla, bla, bla, pero me duele la cabeza, tengo frío, así que si de verdad quiere ayudarme tráigame lo que le pido y no me suelte el mismo sermón -.
Aquella muestra de chulería, acabó por agotar tu paciencia, te levantaste de la silla y te colocaste a su lado, agarrándolo del brazo.
-
Me tienes ya un poco cansado con tanta tontería, así que te lo voy a repetir una última vez, cuéntamelo todo o te aseguro que……. -.
Tan solo te ofreció una única contestación, la que abrió la caja de los truenos y te lanzó de lleno al precipicio.
-
Tan solo quiero un poco de agua y descansar, tengo mucho frío y me duele todo el cuerpo -.
No hubo más palabras, en décimas de segundo, el sediento asesino yacía en el suelo rodeado de un charco de sangre. En tu mano portabas el objeto punzante que estaba acabando con su vida, mientras mirabas como se desangraba, repetías el movimiento contra su pecho, acelerando su fallecimiento. Una única pregunta lanzabas al aire mientras clavabas el dolor en lo más hondo de su pecho.
-
¿ Porque…… porque ?
No hubo lugar para nada, la verdad se la llevó consigo sin darte la posibilidad de conocer el motivo. Acto seguido, aquella sala se llenó de policías los cuales notificaron tu futuro más inmediato. Por más que quisieras preparar tu auto defensa, el veredicto estaba claro, unas cámaras que captaron el momento, el objeto con el cual acabaste con su vida y el ensañamiento al que le sometiste, fueron pruebas más que suficientes como para colocarte tras unos barrotes el resto de tus días.
Te tomaste la justicia por tu mano y lo acabaste pagando muy caro, pero en el fondo sentías una inmensa sensación de paz, pusiste fin a tantos meses de angustia, dando el mismo destino que a tu esposa. No obtuviste las respuestas que andabas buscando, pero por contra, te apropiaste de la venganza sin lugar al remordimiento.
Los años posteriores pasaban sin pena ni gloria en una fría y cochambrosa celda , la rutina era el plato principal, el tedio era el segundo plato y la soledad el postre. A marchas forzadas te acostumbraste a tener el mismo objetivo cada día….. sobrevivir entre la ley del más fuerte.
No eras muy dado a tener visitas, salvo alguno de tus amigos, nadie más se acercaba a interesarse por ti. Pero de entre todas ellas, hubo una la cual jamás habrías esperado. Una mujer que decía conocerte por una de tus incontables aventuras y que estaba dispuesta a ayudarte para salir de esa vida tan ruinosa.
Estabas intrigado por saber la identidad de aquella persona, así que accediste a intercambiar unas palabras y desvelar sus intenciones.
-
Perdón pero…. nos conocemos ? -.
-
Ya lo creo que si, más de lo que piensas -.
Aquello no hacía más que alimentar tu intriga, los ejercicios de memoria eran en vano.
-
Tendrá que disculparme pero no se quien es usted ni porque ha venido hasta aquí -.
-
¿ Ya no te acuerdas de mi ? -.
Habías concedido ya demasiado tiempo a la broma, así que te levantaste de la silla dando por concluida la visita.
-
Mire no se ni quien es ni que quiere, pero sea lo que sea ya puede irse por donde vino, no estoy para acertijos -.
La misteriosa mujer, no quiso concluir la charla, así que utilizó la primera unidad de sus armas para hacerte retroceder.
-
Tus padres están muy contentos con la transferencia que les hiciste tiempo atrás, me consta que ahora mismo no les falta de nada -.
-
¿ Que sabe de mis padres y como conoce lo del dinero que les envié? -.
-
Verás , no he venido hasta aquí para ayudarte, para serte sincera me trae sin cuidado lo que te pase, tan solo he venido a contarte la verdad y que vivas con ello hasta tu último aliento -.
Dudabas entre continuar descubriendo o mantenerte en la ignorancia ; finalmente te decantaste por la primera para saciar tu curiosidad.
-
¿ Me va a decir de una vez quien demonios es y porque me cuenta todo esto ?-.
-
Mmmmmm veamos, por donde podría empezar. Digamos que, estuviste jugando con fuego durante mucho tiempo y al final te has acabado quemando -.
Un escalofrío recorrió todo tu cuerpo, la mirada de sorpresa de uno contrastaba con la ironía de otra, no sabías a que se refería pero estaba muy segura de si misma, y eso te creaba más dudas. Aún así quisiste echar balones fuera y desentenderte de tu pasado.
-
No se de que me está hablando, o se equivoca de persona o definitivamente está loca -.
-
¿ Hasta cuando vas a seguir negándolo todo ? ¿ O ya no te acuerdas de los múltiples engaños a tu mujer ? -.
La sacudida fue brutal, balbuceabas tratando de encontrar palabras pero todo era inútil, te estabas negando a creer lo que estabas oyendo.
-
Esto cada vez me está gustando menos, o me cuenta quien es o ya se puede largar de aquí y no volver nunca más -.
-
Esta bien, esta bien tu ganas, me hubiera gustado poner más intriga al momento pero en vista de que tienes prisa…. -.
En ese preciso instante, extendió su brazo derecho y abrió de par en par la mano mostrando un anillo de boda. Tu cara era todo un poema, infinidad de recuerdos se te agolpaban mientras no dejabas de contemplar ese objeto brillante.
-
Pero…… ese es el anillo de mi difunta esposa, ¿ como puede ser que lo tenga usted ? -.
-
¿ Sabes ? El día que me lo pusiste en el dedo delante de centenares de invitados, me juraste amor eterno y fidelidad, pero con el paso de los años, ni una cosa ni otra -.
Tenías la sensación de estar viviendo una pesadilla, una mujer la cual ignorabas su identidad, te mostró el anillo de boda y por sus palabras, tu mismo se lo regalaste. te negabas en rotundo a atar cabos ; por un lado, creías del todo improbable lo que tu mente imaginaba pero por otra parte, ver ese valiosísimo anillo, hacía disparar todo tipo de hipótesis.
Estabas herido de muerte en tu conciencia y ese hecho fue aprovechado para asestar el golpe de gracia, estabas a punto de ser enterrado en vida.
-
Como veo que esto irá para largo, lo resumiremos empezando de nuevo. La mujer que tienes delante es aquella que, te ninguneó varias veces , la reencontraste en un bufete, os casasteis y tuvisteis un maravilloso hijo….. el único bonito recuerdo que tengo de ti -.
Tus peores presagios se acababan de confirmar, habías vivido una mentira y ahora te enfrentabas a ella.
-
Pero….. tu, ¿ como es posible ? Estabas muerta, yo mismo fui a reconocer el cadáver y asistí al funeral -.
-
Como bien recordarás, estudié dos años como médico forense, si a ello le sumamos la incalculable suma de dinero gracias a la lotería….. no sabes la de cosas que se pueden comprar….. personas incluídas. Antes de que me preguntes, te diré que el cambio de look fue obra de mis conocimientos de cirugía y un prestigioso doctor que hizo una auténtica obra de arte. Al principio no aceptó pero, fue quitarme la ropa, abrirme totalmente para el y aguantar 5 minutos su vomitivo aliento. Si te soy sincera tuve mucha suerte, de no ser por todo ese dinero, quizás todo seguiría igual -.
-
¿ Quien demonios es la persona que confesó ser tu asesino….. acabé con la vida de un inocente por nada ? -.
-
Bueno, inocente, inocente….. tampoco diría tanto, el pobre desgraciado tenía un curriculum importante. Por una dosis, estas personas hacen lo que sea con tal de conseguirla. en el mundo hay un drogadicto menos y deberías sentirte orgulloso -.
Tus ojos reflejaban un vacío enorme, lanzabas preguntas prácticamente por inercia, pero en tus pupilas no había nada de nada.
-
¿ Por que me has hecho esto, porque has montado todo este circo ? -.
-
¿ De verdad pensabas que todas esas patrañas que me contabas me las creía ? Se perfectamente que has pasado por la entrepierna de casi todas las mujeres de esta ciudad. También se que me había casado con el semental ajeno y yo me quedaba con el papel de tonta, pero….. ahora todo es distinto, yo voy a vivir a costa de una inmensa fortuna y tu vas a pudrirte en este antro de mala muerte -.
-
Eres una grandísima……. -.
-
Shhhhh, baja la voz no te conviene formar un espectáculo que empeore tus días aquí -.
La partida de ajedrez estaba a punto de concluir, daba la impresión de que, los escuderos del rey lo dejaron al descubierto a merced de la implacable reina, estabas arrinconado y cualquier movimiento sería letal.
-
¿ Me estás diciendo que todo esto ha sido por pura venganza ? -.
-
Yo prefiero llamarlo, una compensación en concepto de daños y perjuicios. Ahora mismo estarás buscando la forma de salir de aquí pero personalmente lo veo bastante negro. Piénsalo bien, legalmente, tu mujer ha fallecido y la única prueba que tenías la sacaste de circulación tu mismo. No esperes que nadie hable en tu favor, como te dije antes, con un buen fajo de billetes, hasta las personas tienen un precio. Me costó mucho dinero comprar el silencio de determinadas personas, pero créeme que ha valido la pena -.
-
Con una frialdad inusitada, fue eliminando todas las piezas de tu parte del tablero, dejando únicamente al rey listo para ser devorado.
-
Ahora tendrás que disculparme pero, como yo ya me quité un enorme peso de encima y tu te quedas con el hasta que te vayas al otro barrio, debo despedirme. Solo te pido que no me guardes rencor, recuerda que Dios da a cada uno lo que se merece -.